Todo sobre las piscinas de arena

Las piscinas de arena son piscinas de obra fabricadas con arena compactada, resinas y otros materiales con el objetivo de lograr un acabado estético muy parecido al de una playa natural.
Hasta no hace mucho, las piscinas de arena solo se veían en hoteles con una cierta categoría, resorts y parques acuáticos que recreaban playas paradisíacas con experiencias únicas.
Hoy en día son muchos más los usuarios que apuestan por este tipo de piscina de lujo de diseños exclusivos, para embellecer los jardines y exteriores de viviendas de uso residencial.
Gran parte del éxito de este tipo de piscina moderna es que pueden adaptarse a cualquier superficie y no existen límites en cuanto la forma, profundidad, diseño.
Cuanto mayor sea el espacio mucho mejor será el resultado obtenido.

Piscinas de arena: pros y contras
Tener una piscina de arena en la vivienda le aporta mucho valor, llegándola a hacer mucho más atractiva.
Entre las principales ventajas de este tipo de piscina de lujo:
- Son piscinas totalmente personalizadas, se adaptan a todo tipo de superficie, incluyendo un diseño único y exclusivo. Uno puede decidir todo tipo de aspectos como la profundidad, tamaño, forma, sistema de climatización, sistema de depuración, etc.
- Pueden escogerse diferentes tonos de arena, llegándose a integrar perfectamente con el entorno o peculiaridades de cada jardín.
- Destacan por ser muy seguras y no tener escaleras. Las piscinas de arena empiezan desde una cota cero y la entrada a la parte más profunda se hace de manera progresiva, como si uno estuviese en la playa.
- Son antideslizantes, tanto en mojado como en seco lo que las hace totalmente seguras para niños, personas mayores e incluso para personas con movilidad reducida.
- Son aptas para todo tipo de climas, llegando a soportar incluso el frío y nevadas.
- Al igual que las piscinas tradicionales también se pueden climatizar. Están preparadas para poder aplicar la misma tecnología que para las piscinas normales.
- Pueden ser desbordantes o piscinas “sin fin”; es decir el plano superficial del agua está al mismo nivel que el terreno donde se ubica creando un efecto único y espectacular ya que parece que el agua cae al vacío. En realidad lo que crea es un efecto espejo muy decorativo sobe todo si desborda ante una bonita vista paisajística.
- Fácil instalación, con un resultado mucho más natural y cálido.
- Sencillo mantenimiento, muy parecido al de las piscinas modernas tradicionales. Depuración, tratamientos apropiados y limpieza de las orillas con sistemas de agua a presión.
Este tipo de piscina de lujo también presenta algún inconveniente:
- La inversión a realizar es mayor con respecto a una piscina tradicional, llegando a variar según requisitos y características que uno elija.
- Hoy en día son las piscinas más caras existentes en el mercado.
- Al utilizar materiales naturales, se aconseja vaciarla cada cuatro años por completo para de este modo proceder a su limpieza en profundidad o incluso sustituir el revestimiento.

Construcción de piscinas de arena
Son las piscinas que más tiempo de obra requieren, entre un mes o dos, dependiendo del sistema constructivo utilizado y si el trabajo va acompañada de un proyecto paisajístico acorde al entorno.
Elegir una buena materia prima ayuda a obtener resultados impresionantes. En la mayoría de las piscinas de arena se utiliza una base de hormigón gutinado para el vaso lo que garantiza la estanqueidad y la adherencia del resto de materiales aunque actualmente el mercado ofrece otras alternativas.
Los materiales cerámicos o porcelánicos, las fibras de poliéster y los liners o láminas armadas, las resinas proporcionan un revestimiento continuo de mayor calidad, son de fácil aplicación y con una resistencia asombrosa, lo que además reduce los costes de mantenimiento de la piscina.
De entre todos los materiales la resina para piscinas de arena es de los materiales más recomendados por su gran resistencia y funcionalidad.
La técnica de construcción y los materiales a utilizar permiten recrear casi cualquier paisaje acuático, moldear el terreno y recrear las formas, el aspecto y la textura de la naturaleza. De ahí que puedan tener esas ondulaciones y pendientes tan características de las playas.
Se utilizan materiales 100% de apariencia natural. Su construcción permite poder adaptarse a cualquier diseño, tamaño, profundidad sin límite alguno.
El cliente puede optar hacer de su piscina de arena una piscina única y exclusiva, decidir por poner elementos de climatización, zonas de spa, sistema de depuración, etc., llegando a crear un sorprendente impacto visual.
Gracias a los materiales utilizados en su construcción se consigue un ligero incremento de temperatura del agua haciendo mucho más agradable el baño.

Uno no puede olvidarse que este tipo de piscina debe de tener un buen sistema depurativo del agua como puede ser la cloración salina, el cloro, el ozono, los ultravioletas…
Cada sistema tiene sus ventajas por lo que es importante contactar con servicios profesionales que le aconsejen y asesoren.
La resina no es el único material que ofrece resultados espectaculares en la construcción de una piscina de arena.
Antes de comenzar la obra es preciso valorar las peculiaridades de las piscinas (diseño, aspectos estéticos, uso que se le va a dar, sellado especial según la ubicación) para de este modo optar por el material que mejor se adapte a las necesidades.
Aparte de las resinas también suele utilizarse el microcemento y arenas.
El microcemento es una buena opción para acabados modernos, elegantes y sofisticados. Se trata de un tipo de revestimiento continuo, sin juntas que brinda gran resistencia y con condiciones de mantenimiento muy poco exigentes.
La arena es la combinación de varios tipos de resinas con los que dar un toque final en el acabado de la piscina más realista. La buena selección de este producto asegura éxito total.
Si lo que uno busca es disfrutar de la playa, las piscinas de arena son una gran opción.